Composición sobre la fotografía, New York, 2013 |
Desde el mes de septiembre se puede contemplar la exposición de fotografía, MIGUEL TRILLO. AFLUENCIAS. Costa Este-Costa Oeste, que reune en lo que fue la antigua Tabacalera, un conjunto de obras de este autor, desde los años ochenta hasta la actualidad. Fotografías de gran tamaño y pequeñas provenientes de cuanto el artista trabajaba con el sistema analógico. Todas tienen en común que retratan la cultura juvenil urbana, las llamadas tribus, determinadas por los gustos musicales y las modas del vestir. Lo más interesante es la comparación que realiza el comisario Javier Diez de establecer un diálogo, una comparación entre las más antiguas, muchas en blanco y negro tomadas en los años ochenta, con otras más recientes en color.
El fotógrafo Miguel Trillo tiene una constante temática desde el inicio de su carrera y por la cual ha creado su identidad como tal. Sin embargo, se ha producido un cambio lógico motivado por el paso del tiempo. El objeto de interés se encuentra más allá de nuestras fronteras. En el norte de África, el sudeste asiático, New York o Los Ángeles. El mundo actual se ha globalizado, se ha uniformizado desde el punto de vista cultural. Así lo jóvenes de los más lejanos lugares, tienden a vestir, a ser rebeldes frente a la cultura oficial de la misma manera.
Casablanca, 2011 |
El autor retrata a los jóvenes y su medio ambiente muchas veces marginal. Los capta sólos o en grupo, sentados o de pie frente a muros repletos de grafitis y carteles. Aparecen orgullosos por su forma de vestir, porque alguien trate de registrar su identidad. La imagen fotográfica se muestra interrumpiendo su cotidianidad, la de hacer malabarismos con bicicletas o tablas o la de ganarse la vida como pueden. Las de mayor atractivo resultan las de plano entero o medio, las centradas en los individuos, expresivas de la forma de ser del retratado. Todos los países en este mundo globalizado tienen en estos jóvenes, por su manera de dotarse de unas señas de identidad particular, una riqueza a tener en cuenta.
Villaverde Alto, Madrid, 1986 |
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