Sprott Church, W. Christenberry, 1977 |
La Fundación Mapfre organiza una exposición retrospectiva del artista norteamericano, WILLIAM CHRISTENBERRY, que reune más de trescientas fotografías, en su mayoría vintage, realizadas entre 1961 y 2007. Nacido en Tuscaloosa, Alabama, en 1936, captó con su pequeña cámara Brownie, los parajes del Sur rural norteamericano que le vieron nacer, porque gran parte de su obra fotográfica tiene su origen en los viajes que anualmente realizaba al condado de Hale para documentar los escenarios de su infancia y juventud. Una época en la que estudió arte en la Universidad de Alabama, actividad que nunca abandonaría. La manera que tiene Christenberry de entenderla se encuentra vinculada con la propia experiencia vital y a un conjunto de historias que constituyen su memoria personal.
El pasado histórico del sur definen su personalidad artística como fotógrafo. No representa la figura humana salvo de forma casual. Le interesa especialmente captar el paso del tiempo por aquellos lugares que siempre conoció, y por otros con los que se encuentra por casualidad. Los lugares donde él vivió de pequeño; las tumbas del cementerio de Stewar; un campo de batalla de la Guerra de Secesión; tiendas y casas de madera abandonadas, deterioradas por el transcurso de los años. De esta manera, buena parte de la muestra la constituyen sus series, que reflejan procesos de envejecimiento y transformación: Palmist Building, The Underground Nite Club, Storefront, The Bar-B-Q Inn, Coleman´s Cafe, Red Building in Forest, Green Warehouse, House and Car o Sprott Church. Desde la primera fotografía en los años setenta a la última, te encuentras a veces que el edificio, o es un montón de escombros, o ha desaparecido, representando la imagen el espacio vacío. La arquitectura en madera antigua le interesa por su valor escultórico unida al sentimental del recuerdo personal vivido. Por ello la exposición incluye maquetas realizadas por el artista de aquellos edificios significativos.
En lo mismo se fija cuando representa las fachadas de la ciudad, la degradación de los edificios, la transformación de los muros, en los que destaca, su interés por los letreros publicitarios, que llenaban sin orden las superficies construidas. La mayoría de ellos se encuentran muy deteriorados por lo que adquieren mayor atractivo. Un grupo los puede ver el visitante de la exposición porque él llegará a coleccionarlos. En los mismos valora la incidencia de la luz y el color a través del tiempo. La publicidad de la marca Coca-Cola sobresale frente a las demás.
En el viaje anual al sur, captó igualmente con la cámara objetos que él encuentra de forma fortuita: ruedas de coches, calabazas para servir de nido a las golondrinas o carteles informativos, de los que le atraen sus formas en el paisaje, la contradicción entre la huella humana y la naturaleza humilde. Este paisaje, por tanto no es el espectacular del romanticismo, sino el común de las gentes. La sociedad religiosa y la segregación racial del sur, fruto del pasado esclavista de la zona, planea y le influye al artista, hasta el punto, que él como testigo de la lucha por los derechos civiles, creó desde 1962, The Klan Room, una acumulación de fotografías y objetos relacionados con este grupo violento y racista. La exposición dedica un espacio a parte a los mismos.
Do you believe in Jesus. I do, Misisipi, 1966 |
Por tanto, Christenberry aporta a la historia de la fotografía la representación de un mundo propio, una visión del sur norteamericano con su problemática. Por otra parte, un estilo individual que arranca de la experiencia desarrollada por James Agee y Walker Evans en el libro, Let us now Praise Famous Men, una de sus influencias decisivas, para crear una actitud pionera en la fotografía artística, por la utilización del color frente al blanco y negro, y las características de la fotografía amateur: el revelado industrial, el pequeño formato y los colores saturados y brillantes. Constituye, así, un ejemplo para aquellos artistas de la fotografía que quieran partir de la realidad cotidiana, para aquellos aficionados o al gran público que deseen conferir una intencionalidad especial a su práctica con la imagen.